“Los obstáculos no tienen que detenerte. Si te encuentras con un muro, no te des la vuelta o te rindas. Averigua cómo escalarlo, atravesarlo o rodearlo”. Michael Jordan
Cuando enfrentamos una adversidad, para superar los efectos nos enfrentaremos a dos retos; el primero es aceptar y sobrevivir moralmente a la derrota. Pero el segundo es buscar y encontrar la energía necesaria para no estancarnos en la tristeza y pesimismo, para utilizar esta derrota como una experiencia más y así de una manera positiva integrarla a nuestra personalidad y biografía.
Si no logramos lo anterior nos estancaremos en emociones destructivas, minando nuestra flexibilidad, autoestima y control de nosotros, lo que nos impedirá poder volver al estado de equilibrio que dicha adversidad destruyó.
El quedarnos estancados nos puede llevar a vivir nuestra vida en las filas de alguno de estos cuatro grupos:
1.- Ser un superviviente que llega a la conclusión de que; jamás podré superarme.
2.- Vivir odiando y estar a la espera de vengarme de los “culpables”, muchos mueren en este estado de odio-venganza.
3.- Encerrarse en la negación y reprensión, “olvidarme del pasado”, evitando todo lo que pueda recordarme mi fracaso.
4.- Convertirme en “eterna víctima”, en el “mala pata”, integrando a mi personalidad el papel de “mártir permanente”
“Debemos aceptar la decepción finita, pero nunca debemos perder la esperanza infinita”. Martin Luther King
MMO. Enero 2021 Mérida Yucatán
Si nos queda energía ante nuestros fracasos, debemos utilizarla hábilmente para retroceder un poco, pero para renovar nuestro impulso y hay quien dice que si cayéramos 9 veces, bien podríamos levantarnos 10…. pero eso NO es posible y yo me levantaría solamente 9….
Se aprende mucho mas delas derrotas que de las victorias
No intentarlo eso si es un fracaso
La única derrota es rendirse, todo lo demás es parte del camino