“Así como el hierro se oxida por falta de uso, también la inactividad destruye el intelecto”. Leonardo Da Vinci
Siguiendo el consejo de Leonardo, aquí terminando de releer algunas partes de, “En defensa de la felicidad”, otro extraordinario libro de Matthieu Ricard, quien tiene la experiencia de ser biólogo, investigador en genética, fotógrafo, monje budista y traductor al francés del Dalai Lama, el nos invita a dejar de buscar a toda costa la felicidad fuera de nosotros.
El libro inicia con un párrafo de Luca y Francesco Cavalli-Sforza, “la felicidad no llega de forma automática, no es una gracia que un destino venturoso puede concedernos y un revés arrebatarnos; depende exclusivamente de nosotros. No se consigue ser feliz de la noche a la mañana, sino a costa de un trabajo paciente, realizado día a día. La felicidad se construye, lo que exige esfuerzo y tiempo. Para ser feliz hay que saber cambiarse a uno mismo”.
En el capítulo primero nos topamos con una cita del gran Jean-Jacques Rousseau, “todo hombre quiere ser feliz; pero para llegar a serlo, habría que empezar por saber que es la felicidad”
Estoy seguro será una gran lectura para el inicio de este año 2020, que inicia con un mundo donde no terminamos de entender que si seguimos usando la violencia en todas sus formas como el instrumento para obtener más poder y riqueza, la humanidad entera desaparecerá.
Mario Montalvo Ortega